Viviendas modulares para una nueva etapa de la construcción.
Las viviendas modulares de las que hace tanto tiempo se habla, y que nosotros conocemos bien. Van a comenzar a dejar de ser algo minoritario puesto que en los últimos años el aumento de las demanda y búsquedas ha sido exponencial. Las peticiones en los últimos cuatro años se han triplicado, especialmente en el norte y centro de España. Se han empezado a ver las ventajas reales que acompañan a este tipo de vivienda como que son tan resistentes y sólidas como las de ladrillo, y materiales que las hacen más eficientes, algo que los españoles no creíamos; por no hablar de su precio final, del orden al 40 por 100 inferior a la construcción tradicional.
Pese a que en otros países como Canadá, EEUU u Holanda está muy estandarizado, en España ha costado un poco más considerar este tipo de vivienda como aceptable. en estos países las viviendas modulares o casas prefabricadas se extendieron en la última parte del siglo XX, y después llegaron a ser muy populares en Francia e Inglaterra, aquí no cuajaban porque se las relacionaba con los barracones para los obreros o para alojar aulas de colegio de forma temporal.
La clave es dejar claro que las viviendas modulares y construcción modular no es sinónimo de temporal y mala calidad, sino de flexibilidad y versatilidad.
Tres tipos de casas
Ante esta creciente demanda, los catálogos se han ido ampliando y arquitectos de reconocido prestigio como Phillippe Starck, que desarrolló las llamadas P.A.T.H (Prefabricated Accessible Technology Home) de gran belleza y con el cristal como protagonista indiscutible.
Otros, como nosotros, han apostado por las casas prefabricadas a base de módulos ensamblados en fábrica e instalados en el terreno y otros por las llamadas «casas kit» que se montan paso a paso in situ.
Por último, casas de contenedores como las que hace la empresa canadiense Honomobo
Honomobo Container Homes from LiveTheLife.TV on Vimeo.
Fuente: Expansión
Sin comentarios